domingo, 23 de diciembre de 2012

Luces de Navidad: Carta a un gobernante que jamás enviaré.

¿Sabéis cuanto cuesta adornar una ciudad relativamente pequeña como Murcia con adornos de Navidad?, ¿Sabéis cuanto cuesta colgar un montón de bombillas entre dos farolas en cada maldita calle de esta ciudad?

¡Mucho!

"Demasiado" es la palabra correcta, sinónimo de "Excesivo". Porque el listón que marca la diferencia entre lo apropiado y lo excesivo baja cuando la crisis acecha, cuando dicen a los ciudadanos que van a cobrar menos, que no van a tener paga de navidad, que los van a despedir de sus trabajos o que los van a desahuciar. En esos momentos la palabra excesivo toma tintes de tragedia si la aplicamos al derroche. El derroche excesivo es lo que matará de hambre a la gente de este país, que lo sepáis.

La palabra crisis está ahora muy de moda, pero a los que gobiernan las ciudades parece importarles muy poco, ¿por qué no poner adornos de navidad o un DJ en mitad de la Redonda para que cante villancicos a la puerta de los centros comerciales? ¡Si eso es cultura!

Pues mire usted, señor gobernante, con mis impuestos no se compran bombillitas, y menos aún con un diseño tan absolutamente horrendo y asimétrico, que parece que haya dado a su hijo unos plastidecor, unos folios y un par de tripis.

Porque no quiero que mis impuestos vayan a parar ahí, porque hay infinitas cosas que quiero pagar en mi ciudad antes que esa basura navideña, muchas gracias.

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